JAÉN
La crisis se lleva por delante casi todas las galerías de pintura de la provincia
Eduma (Linares) y Unodeuno (Jaén) aguantan el tipo pese a que las ventas de cuadros son prácticamente inexistentes.
Eduma. La galería de Eduardo Palomares lleva 38 años abierta, es de las más antiguas de Andalucía. :: Noticia por IDEAL
Tanto los pintores o escultores, como los galeristas (que también son artistas) están sufriendo una grave situación por la tendencia económica de los últimos años. La realidad es que ya prácticamente ninguno puede 'vivir del arte', o sea que para poder mantener su hogar han de desempeñar otras funciones profesionales.
Lo saben muy bien los propietarios de las principales galerías privadas de la provincia (quedan muy pocas). En Linares, Eduardo Palomares lleva 38 años al frente de Eduma, y asegura que en el último año las visitas a sus exposiciones han sido muy escasas, y que no han vendido absolutamente nada. Afirma que «lo que yo he tenido hasta ahora es un lujo, exposiciones a las que venían hasta 100 personas sólo a la inauguración, para ver los cuadros de artistas de nombre a nivel nacional, eso está llamado a desaparecer. No sé cuánto tiempo llevo sin vender un cuadro».
Y es que la adquisición de un cuadro no es algo que todos se puedan permitir, el precio medio de los de formato mediano de artistas profesionales puede estar en 1.500 euros. Los clientes de las galerías eran abogados, médicos, notarios, arquitectos, etc. En definitiva clase media-alta, acomodada, que está perdiendo su poder adquisitivo. Sin embargo, Palomares explica que las obras de grandes artistas, las que valen más de un millón de euros, siguen moviéndose en el mercado, ya que el arte es considerado como una inversión. Pero pese a esta situación y la ausencia de ventas, su intención es seguir con la galería como pueda, ya que le quedan unos 7 años para su jubilación. «Seguiré con la galería, porque me muevo. Ahora mismo tengo una exposición colectiva, ya no hago individuales porque suponen un gasto muy grande para un solo autor».
Otra galería que encontramos en Jaén es Unodeuno, en la capital. La regenta David Martínez, que cuenta que desde hace un par de años no hay mercado. «Es muy difícil comerciar con arte, no es un elemento de primera necesidad, hay muchos artistas que no encuentran salida a sus obras y tienen otros oficios, porque vivir de sus creaciones es casi imposible, a excepción de algunos privilegiados. El último año ha sido un desastre, pero la necesidad de crear nos hace seguir trabajando. Los precios teóricos de venta han bajado muchísimo, hace unos años la concepción de la obra de arte quizá era demasiado alta porque había más mercado, ahora se vende muy poco, y las pocas que se puedan vender son bastante baratas. En los últimos tiempos las únicas obras que tienen salida son las gráficas, de papel o seriadas de pequeño formato, es decir, las más económicas, y aún así es muy difícil».
Aunque económicamente no haya buenos resultados, este año la galería Unodeuno pretende seguir trabajando, «seguimos en la trinchera, espero que todo se normalice, la cultura y el arte no se deben dejar de trabajar. Es importante que los artistas y profesionales, junto con las administraciones, pongan de su parte en una apuesta decidida, honesta y real por la comunidad artística, para que las cosas vayan a mejor. En Jaén es muy complicado, creo que tanto Diputación como la Junta de Andalucía y el Ayuntamiento tienen la voluntad pero no los recursos, pero nos apoyan con la organización de ArtJaén».
Eduardo Palomares tiene una visión diferente acerca del papel que debe tener el sector público en el arte. «Nunca he creído que la cultura tenga que ir en función de las subvenciones. Muchos han vivido de obtener primero la subvención y luego crear, tiene que ser al revés, primero la cultura por iniciativa propia del artista, y luego las ayudas».
ArtJaén
Eduardo Palomares fue el impulsor de la feria de Arte Contemporáneo, que comenzó a celebrarse en nuestra provincia en el año 2007. Después de tres ediciones dio el relevo otros responsables. David Martínez está encargándose de la organización de la sexta edición, que se va a celebrar entre los días 3 y 30 de octubre. El Museo Provincial y varias vías públicas serán los escenarios de proyectos artísticos, obras de toda clase o performance, además de conferencias que pretenden implicar a la comunidad académica. «En una feria las propuestas son más creativas que las que habitualmente hay en una galería, porque son para personas de poder adquisitivo medio, con un mínimo de educación artística, que entienden y buscan otra cosa, algo contemporáneo, no un bodegón. En la feria los artistas suelen vender algo más, pero poco».
Por su parte, Eduardo Palomares recuerda las tres primeras ediciones con cariño. «Venían galerías privadas pagando su stand, se exponían miles de cuadros, participaban fundaciones, la Universidad de Jaén, fueron 3 años muy bonitos, pero muchos no volvieron. ArtJaén tuvo un principio muy interesante, con más de 7.000 visitantes que se marchaban con un agrado especial, pero ahora bajo mi punto de vista lo que hacen ya no es ArtJaén, por lo que podrían ponerle otro nombre, no me parece adecuado que lo utilicen cuando este evento es diferente».
Alternativas
A la vista de que en Jaén no consiguen vender sus obras, cada vez más artistas intentan llevarlas a otros mercados. Eduardo Palomares señala que muchos galeristas españoles están abriendo negocios en otros países. Palomares ha sido seleccionado como Comisariado de ARTEÑE, Feria Internacional Virtual de arte contemporáneo que se celebrara entre el 10 y 13 de junio. «Es una oportunidad para muchas galerías de participar en un evento sin moverse de casa y lograr clientes de Estados Unidos o Japón entre otros. También es una puerta para los artistas españoles».
Tanto los pintores o escultores, como los galeristas (que también son artistas) están sufriendo una grave situación por la tendencia económica de los últimos años. La realidad es que ya prácticamente ninguno puede 'vivir del arte', o sea que para poder mantener su hogar han de desempeñar otras funciones profesionales.
Lo saben muy bien los propietarios de las principales galerías privadas de la provincia (quedan muy pocas). En Linares, Eduardo Palomares lleva 38 años al frente de Eduma, y asegura que en el último año las visitas a sus exposiciones han sido muy escasas, y que no han vendido absolutamente nada. Afirma que «lo que yo he tenido hasta ahora es un lujo, exposiciones a las que venían hasta 100 personas sólo a la inauguración, para ver los cuadros de artistas de nombre a nivel nacional, eso está llamado a desaparecer. No sé cuánto tiempo llevo sin vender un cuadro».
Y es que la adquisición de un cuadro no es algo que todos se puedan permitir, el precio medio de los de formato mediano de artistas profesionales puede estar en 1.500 euros. Los clientes de las galerías eran abogados, médicos, notarios, arquitectos, etc. En definitiva clase media-alta, acomodada, que está perdiendo su poder adquisitivo. Sin embargo, Palomares explica que las obras de grandes artistas, las que valen más de un millón de euros, siguen moviéndose en el mercado, ya que el arte es considerado como una inversión. Pero pese a esta situación y la ausencia de ventas, su intención es seguir con la galería como pueda, ya que le quedan unos 7 años para su jubilación. «Seguiré con la galería, porque me muevo. Ahora mismo tengo una exposición colectiva, ya no hago individuales porque suponen un gasto muy grande para un solo autor».
Otra galería que encontramos en Jaén es Unodeuno, en la capital. La regenta David Martínez, que cuenta que desde hace un par de años no hay mercado. «Es muy difícil comerciar con arte, no es un elemento de primera necesidad, hay muchos artistas que no encuentran salida a sus obras y tienen otros oficios, porque vivir de sus creaciones es casi imposible, a excepción de algunos privilegiados. El último año ha sido un desastre, pero la necesidad de crear nos hace seguir trabajando. Los precios teóricos de venta han bajado muchísimo, hace unos años la concepción de la obra de arte quizá era demasiado alta porque había más mercado, ahora se vende muy poco, y las pocas que se puedan vender son bastante baratas. En los últimos tiempos las únicas obras que tienen salida son las gráficas, de papel o seriadas de pequeño formato, es decir, las más económicas, y aún así es muy difícil».
Aunque económicamente no haya buenos resultados, este año la galería Unodeuno pretende seguir trabajando, «seguimos en la trinchera, espero que todo se normalice, la cultura y el arte no se deben dejar de trabajar. Es importante que los artistas y profesionales, junto con las administraciones, pongan de su parte en una apuesta decidida, honesta y real por la comunidad artística, para que las cosas vayan a mejor. En Jaén es muy complicado, creo que tanto Diputación como la Junta de Andalucía y el Ayuntamiento tienen la voluntad pero no los recursos, pero nos apoyan con la organización de ArtJaén».
Eduardo Palomares tiene una visión diferente acerca del papel que debe tener el sector público en el arte. «Nunca he creído que la cultura tenga que ir en función de las subvenciones. Muchos han vivido de obtener primero la subvención y luego crear, tiene que ser al revés, primero la cultura por iniciativa propia del artista, y luego las ayudas».
ArtJaén
Eduardo Palomares fue el impulsor de la feria de Arte Contemporáneo, que comenzó a celebrarse en nuestra provincia en el año 2007. Después de tres ediciones dio el relevo otros responsables. David Martínez está encargándose de la organización de la sexta edición, que se va a celebrar entre los días 3 y 30 de octubre. El Museo Provincial y varias vías públicas serán los escenarios de proyectos artísticos, obras de toda clase o performance, además de conferencias que pretenden implicar a la comunidad académica. «En una feria las propuestas son más creativas que las que habitualmente hay en una galería, porque son para personas de poder adquisitivo medio, con un mínimo de educación artística, que entienden y buscan otra cosa, algo contemporáneo, no un bodegón. En la feria los artistas suelen vender algo más, pero poco».
Por su parte, Eduardo Palomares recuerda las tres primeras ediciones con cariño. «Venían galerías privadas pagando su stand, se exponían miles de cuadros, participaban fundaciones, la Universidad de Jaén, fueron 3 años muy bonitos, pero muchos no volvieron. ArtJaén tuvo un principio muy interesante, con más de 7.000 visitantes que se marchaban con un agrado especial, pero ahora bajo mi punto de vista lo que hacen ya no es ArtJaén, por lo que podrían ponerle otro nombre, no me parece adecuado que lo utilicen cuando este evento es diferente».
Alternativas
A la vista de que en Jaén no consiguen vender sus obras, cada vez más artistas intentan llevarlas a otros mercados. Eduardo Palomares señala que muchos galeristas españoles están abriendo negocios en otros países. Palomares ha sido seleccionado como Comisariado de ARTEÑE, Feria Internacional Virtual de arte contemporáneo que se celebrara entre el 10 y 13 de junio. «Es una oportunidad para muchas galerías de participar en un evento sin moverse de casa y lograr clientes de Estados Unidos o Japón entre otros. También es una puerta para los artistas españoles».
No hay comentarios:
Publicar un comentario