Pasear por sus galerías y salas es un privilegio sólo reservado a sus trabajadores y archiveros.
La Biblioteca Nacional de España (BNE) es una de las grandes bibliotecas estatales del mundo, tanto por su importancia histórica como por su abultado y valioso archivo. Un emblemático edificio donde se ha depositado el conocimiento y la creación artística de todo un país.
Al subir las escaleras de su imponente puerta principal, flanqueada por Alfonso X el Sabio, Cervantes y Lope de Vega, ya se anticipa la grandeza que descansa en su interior. Una inmensidad de sabiduría, creación literaria y arte acumulada a lo largo de los siglos y debidamente conservada y catalogada.
Fundada en 1711, en la Biblioteca Nacional se ingresa, deposita y archiva todo el patrimonio bibliográfico y documental que se publica en España, en cualquier tipo de soporte, ya sea papel, vídeo o audio, que posteriormente se pone a disposición del público, tanto para su consulta en el propio edificio, como a través de su página web, la Biblioteca Digital Hispánica.
Los datos son abrumadores: más de 30 millones de publicaciones entre libros, revistas, incunables, discos, mapas, partituras, fotografías, dvd, cromos, calendarios, carteles, etc. En torno al 95 por ciento de todos los ingresos se realizan a través del depósito legal, que es la obligación que en España tiene todo impresor.
El interior del edificio se organiza en varias salas y salones, cada una dedicada a una serie de departamentos. Así, por ejemplo, en la Sala Cervantes se pueden encontrar manuscritos antiguos o incunables, laSala Goya está dedicada a dibujos, mapas o fotografías, en la Sala Barbieri se encuentra catalogado el contenido audiovisual, como partituras escritas e impresas, grabaciones sonoras o documentos multimedia. También es posible consultar prensa, revistas o boletines oficiales en la sala de Prensa y Revistas.
En las entrañas de este emblemático edificio es agradable descubrir alguno de los pequeños secretos que esconde. Por ejemplo, el pequeño castillo de madera hecho expresamente para contener el códice de Per Abat del Poema del Cid donado en 1960 a la Biblioteca Nacional.
Un recorrido por los rincones de la historia y cultura hispana generada a lo largo de los siglos, que debe ser mantenida, protegida y facilitada al público, por su enorme riqueza como patrimonio intelectual y artístico de los españoles.
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